Julio - Voz principal, Guitarra
Bellotas - Bajo, Coros
Mack ''Barracuda'' Paramo - Guitarra, Armonica
Mercedes - Bateria, coros

Artwork por Manuel Eiris

Como no podía ser de otra manera en la historia de una banda afincada en Compostela, esta empezó en un día de lluvia. Uno de esos múltiples días donde presta más refugiarse que andar pisando adoquines y charcos. Un día de esos donde se disfrutan más las canciones hirientes que salen desde lo más profundo de las entrañas. Un día de esos en los que liberar tensiones y descargar pasiones se vuelve una necesidad más que vital. Pues sí, un día gris, de lluvia permanente y desapacible panorama empuja a Julio (ex Tumbitas, ex Motherfuckers) y Merchi a atrincherarse en un, como no, húmedo local para ensayar canciones que desde hacía tiempo gravitaban por sus cabezas. Influenciados por infinidad de bandas de sonidos crudos e intensos (Gories, Oblivians, Cheater Slicks, Velvet Underground…) comienzan a dar forma a un bicho que poco a poco se vuelve hambriento y libre. Tiempo después este dúo se amplía a trío primero, con la entrada de un nuevo guitarra (Manuel), y luego a cuarteto con la entrada de Jose (ex Os Anais, ex The Tractors) al bajo. Y el bicho se hizo monstruo. Sonando como una suerte de garaje punk ruidista, llenos de feedbacks y psicodelia, comienzan a dar conciertos y el apetito de este monstruo comienza a ser cada vez más grande. Manuel se ve obligado a dejar la banda, pero sigue implicado en ella en cuanto a la faceta artística aportando posibles portadas y otras ideas para lo que será su primera referencia. Su lugar lo ocupa ahora Martín aka Mack Paramo (Los Thyssen) y el sonido da un giro, dos giros…una infinidad de giros para acabar en el mismo sitio pero con unos matices diferentes, con una sonoridad que bascula entre los sonidos salvajes y pantanosos y la psicodelia, las influencias (Dead Moon, Scientists, Mudhoney…etc) siguen ahí pero ahora…el monstruo devoró al hombre y en los conciertos cabalgan los temas empujados por riffs incendiarios, bajos y baterías que pisan cual mamuts, slides delirantes y letras que hablan de compromisos, amor, desamor, inquietud, ambición … Son THEE BOAS.

Naturally, in the story of a band based in Compostela, it began on a rainy day. One of those many days where it would be better to look for shelter than to walk stepping over cobblestones and puddles. One of those days where you can enjoy better a hurtful song that comes from the deep bottom of the heart. One of those days where liberating tensions and releasing passions becomes a more than vital necessity. Naturally, it was a grey and rainy day what pushed Julio (exTumbitas, exMotherfuckers) and Merchi to entrench themselves in a, of course, damp practice room to rehearse songs that had gravitated in their heads for a long time. Under the influence of a bunch of raw and intense bands (Gories, Oblivians, Cheater Slicks, Velvet Underground…) they began to shape a creature that eventually became hungry and free. Later on, the pair expanded first to a trio when new guitarist Manuel joined them, and then to a quartet, with the addition of Jose (ex Os Anais, ex The Tractors) on bass. And the creature became a monster. As the band started playing gigs that sounded like a sort of noisy garage punk packed with feedback and psychedelia the monster started to get more and more voracious. At one point Manuel had to leave the band, although he still kept involved, designing possible covers and giving ideas for their first record. He was replaced by Martin, a.k.a. Mack Paramo (Los Thyssen) and the sound took a new turn, two, three, infinite, to end up in the same place but with different shades, with a sonority that swings among savage and swampy sounds and also psychedelia, the influences (Dead Moon, Scientists, Mudhoney..etc) are still there, but now the monster has devoured the man and it rides inflammable riffs at gigs, where bass and drums stomp like mammoths, slides are delirious and the lyrics talk about commitment, love, heartbreaks, agitation, ambition… they are THEE BOAS!